3 cosas de mi pre-maternidad que he aprendido a disfrutar

Disfruto de mi vida como madre, y son muchas las cosas buenas que me ha traído a parte de lo evidente, que es ese bichillo con cara de trasto que me recuerda cada día que tome la mejor decisión de mi vida al buscarle. Estas son simplemente algunas cosas que, por su actual escasez, disfruto mucho más que antes.

Los momentos de relax

Aunque decir momentos de relax no es exacto del todo. Porque hacer un puzzle, leer o bordar pueden ser momentos de relax perfectos, pero ya implican una actividad. Me refiero a la quietud total, lo que los modernos llaman el dolce far niente que de toda la vida de dios ha sido tocarse er jigo. Tumbarme en el sofá y observar las imperfecciones del techo mientras en mi cabeza suena un tralaralará larilará chubidubidú. Dar vueltas en una silla giratoria y pensar: ¡Anda! una estantería, ¡Anda! una caja, ¡Anda! una ventana, ¡Anda! un escritorio, ¡Anda! una estantería, y así sucesivamente. Así como un poco Homer Simpson y el momento mono con platillos o como un tronista de MHYV: el encefalograma como una balsa de aceite, oigan. Estos momentos son muy pocos, pero y lo que los disfruto…

chubidubi

fumar

Hace tiempo escribí un post sobre lo bien que me encontraba desde que dejé de fumar en el embarazo. Ha llegado la hora de confesar la verdad: recaí como una perra. Lo que sí es cierto es que ahora fumo muy muy poco, porque en el trabajo no puedo y cuando estoy con el niño tampoco, así que de los 3 cigarros diarios no paso la mayoría de los días. Lo que antes para mí era un hábito rutinario que ya hacía mecánicamente ahora se ha convertido en un verdadero disfrute y esos tres cigarros me saben a gloria bendita.

cigarro

arreglarme

Y es que por las prisas, y todo sea dicho, porque no tengo ni putas ganas de lo contrario, salgo a la calle cada día sin una gota de maquillaje, pero es que ni una pizca, y yo antes era de “ni a por el pan sin corrector de ojeras y máscara”. El caso es que cuando me miro en el espejo y me veo la cara de otra, lo echo de menos y pienso: anda hija, que ya podrías haberte parado un poquito a adecentarte, que hay extras de Zombies Party con más lozanía que tú. Por eso, cuando por fin consigo encontrar ese hueco para arreglarme, lo que antes era algo muy normal en mi día a día, ahora me hace sentirme como la reina del mambo. Y no penséis que soy una madre mártir que sacrifica su propia apariencia por otros menesteres ineludibles, que no lo hago con más frecuencia porque igual prefiero aprovechar ese tiempo para dar vueltas en una silla giratoria.

beso

¿Os sentís identificadas con alguno de estos momentos de disfrute?

34 comentarios en “3 cosas de mi pre-maternidad que he aprendido a disfrutar

  1. Yo aún no he conseguido ese momento de «tocarme er jigo», así que mi momento se relax es cuando me ducho más de 5 min seguidos!
    Es orgasmico!!!!
    Pero bueno, ya llegará ese momento de la silla giratoria de dejar el encefalograma más que plano!
    Besitoooosss!!!!

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  2. Jajajajaja, me meo con este post. Como me siento de identificada, oiga. Yo disfruto de lo mismo que tú, pero cambio lo de arreglarme (que si que lo hago porque al curro no puedo ir sin arreglar) por la hora del café+capitulo de serie americana, que me luce como si me fuese de vacaciones. Besicos mari, muy buen post

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  3. Dios, nivel de identificación 10 de 10 con el punto 3 sobre todo.. Y no, pasan los años y yo no retomo el tema d intentar salir a la calle como un ser normal, yo soy del club zombie ( y no por falta de tiempo, se mezcla pereza extrema con todo m importa un pito) . No quiero imaginar lo q la doble maternidad hará con mi imagen …

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    • La doble maternidad es docle caos, para la madre, en cuestión de arreglarse sobre todo…..pero tranquilas que cuando se van haciendo mayores la cosa cambia. Volvemos a ser nosotras mismas solo que llevamos a nuestras criaturitas a todas partes 😉 Yo llevo ya un par de añitos que he vuelto a verme guapa al espejo¡¡¡¡ jajajajaja. Paciencia todo llega en esta vida 😉

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  4. ojalá encontrara ese momento de ponerme monísima… y eso que nunca he sido de arreglarme mucho pero las ocasiones en las que podría terminan quedando en nada porque entre preparar a uno y otra y que el padre es de los que no encuentra nada cuando vamos a salir la única que va con lo primero que pilla y la cara lavada soy yo 😦 Pero bueno… el momento tocarse er jigo no lo pierdo… lo necesito de vez en cuando y lo disfruto… sobremanera 😉

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    • Cuando yo digo «arreglarme» no me refiero a ir de punta en blanco, que conste. Me refiero a parecer una persona normal a la que no te dan ganas de acercarte a darle un euro, jajaja. Besos.

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  5. Sí! desde luego! Creo que desde que soy madre todos los momentos que son para mí (sólo para mí) los disfruto como loca, porque son taaaan pocos… Últimamente mis ratitos de relax son cuando todos en casa duermen y puedo leer un ratito antes de dormir. Me encanta esa tranquilidad, lo malo es que estoy tan cansada que el ratito es corto 🙂

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    • Yo antes leía mucho, ahora me falta algo fundamental: capacidad de concentración. Leo el mismo párrafo 4 veces y al final acabo diciendo: bah, voy a mirar el techo, jejeje. Besos!

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  6. Yo no he fumado nunca, y ahora no voy a empezar. Lo que he conseguido es poder ir al gimnasio, y tener algún ratito para mi (después de llevar a mi gatita a la guardería, claro). Me encanta este blog.

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    • Lo del gimnasio es genial, ojalá tuviese unos horarios compatibles con poder apuntarme a alguno, pero de momento mi único ejercicio consiste en subir y bajar escaleras, tirarme al suelo a jugar y correr los 100 metros lisos por la calle cuando voy con Frikito (que no es moco de pavo). En fin, muchas gracias por tu comentario y esperamos seguir leyéndote por aquí! Muack.

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  7. La verdad es que si… El día que te arreglas es como algo tan divino.
    Como un momento de relax, cuando sabes que lo vas a tener planeas mucho y luego hay veces que lo mejor es sentarse en el sofá.
    Yo sigo sin fumar y sin beber. Lo único q echo de menos es poder tomar una copita de vez en cuando. Para mi lo más difícil de la lactancia y lo llevo bien. El fumar, me alegro el no haber vuelto. Espero no recaer 😉

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    • No tienes por qué!! Yo he recaído por tonta, porque ya llevaba casi dos años y al final me ha podido más la ansiedad. Lo bueno es que, como digo en el post, es muy poco y de momento no siento la necesidad de fumar más. Espero seguir así. Ánimo y no recaigas!

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  8. Sí a todo amiga!!! En todo me identifico! Ese rato de mirar al techo es lo mejor y si estoy fumándome un cigarro a la vez… ya ni te digo. Lo del maquillarme también, lo hago de año en año y cuando lo hago… oh yeah, me dice que estoy mona hasta el chico que vende kleenex en el semáforo!

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  9. Pues sí, qué de cosas que antes eran habituales y no valorabamos tanto y ahora son super placeres: una ducha sin prisas, el arreglarte ( ahí coincido contigo), el momento sofá cuando se duermen, el momento desayuno sí no madrugan mucho, etc.

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  10. Con los puntos uno y tres me veo en un espejo!! Y para el dos, vale cambiar fumar por comerme un yogur sin que sea a escondidas y corriendo para no tener que repartir con el mini yonki de los Danones? Si vale, me identifico con las tres!

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